Origen: Madagascar

Peso: 35 quilates

Dimensiones: 29 x 24 x 7,7 mm

Sin tratamiento

El cordón no está incluido con el colgante.

HISTORIA DE LA PIEDRA LABRADORITA

Procedente de la región de Labrador en Canadá, la piedra labradorita fue descubierta por misioneros moravos en 1770 que se encontraban allí para trabajar con determinados pueblos indígenas, en particular los inuit. Ellos fueron los encargados de evangelizarlos. Los pueblos Innu (Montagnais-Naskapis) e Inuit creían que la piedra labradorita era nada más y nada menos que una piedra de fuego procedente de las auroras boreales del norte y sur del planeta. Según ellos, el frío la congeló en el punto más alto y luego cayó al suelo. La labradorita debe su nombre al geólogo Foster, quien la llamó así por primera vez en 1780.

Según ciertas creencias, la piedra labradorita apareció después de que un guerrero inuit golpeara una labradorita con su lanza. Entonces habría aparecido y creado la aurora boreal. Hoy en día, las labradoritas que se pueden encontrar en los diferentes yacimientos que los componen representan los rayos de la aurora boreal encerrados en la roca. También según las mismas creencias, la labradorita desempeña un papel similar al encerrar las almas de los antepasados. El polvo de labradorita también se utilizaba para contrarrestar muchas dolencias.

En 1940, se descubrió un nuevo depósito de piedra labradorita cuando muchos mineros comenzaron a diseñar trampas para detener los tanques enemigos. La labradorita estaba entonces a la venta con el nombre de Spectrolite. Comúnmente llamada “piedra lunar arcoíris”, la labradorita también se llama carnatita, mauilita, silicita, espectrolita, radauita o incluso hafnefjordita. Se utiliza como objeto decorativo en edificios. También representa una piedra preciosa que hay que cuidar y para la cual los reflejos son inexistentes.

VIRTUDES Y PROPIEDADES DE LA PIEDRA LABRADORITA EN LITOTERAPIA

En litoterapia, la piedra labradorita es conocida por sus propiedades protectoras. Es extremadamente protector al absorber lo negativo pero también por ser un escudo en sí mismo. La labradorita protege tanto de lo negativo del entorno como al mismo tiempo absorbiéndolo hasta su total disolución.

Usada en joyería como un colgante de labradorita en contacto con la piel, la piedra labradorita desarrolla el atractivo del ser hacia los demás. Por tanto, esta piedra es muy recomendable para personas que sufren de soledad. Se reconoce que la acción de la labradorita es regeneradora a nivel físico y mental tras períodos de agotamiento. El aura encuentra así armonía y se reequilibra a través de la piedra.

Si colocas un objeto como una bola de labradorita para equilibrar y armonizar la energía en un lugar como la sala o el dormitorio, recuerda limpiarlo frecuentemente para que se recargue de las ondas negativas circundantes, tu lugar quedará limpio. Además, notarás que la piedra labradorita puede variar en tonalidades, desde pálidas hasta menos pálidas y viceversa. Notarás que también es posible verlo agrietarse y luego volver a su estado natural. Esto significa simplemente que te ha ofrecido plenamente sus virtudes y que lamentablemente ha llegado el momento de desprenderte de él porque ya no tendrá la misma eficacia.

La piedra labradorita se aplica en litoterapia a la altura del corazón o a la altura del plexo solar. Por ejemplo, si coloca una piedra naranja en su plexo solar y una labradorita al lado, su paciente verá que su dolor se alivia y la labradorita absorberá las energías negativas.

Las indicaciones relativas a la litoterapia no excluyen en ningún caso la visita al médico en caso de problema de salud.

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REFERENCIA FB26