Altura: 11,02 pulgadas (28 cm)
Ancho: 4,33 pulgadas (11 cm)
Profundidad: 3,14 pulgadas (8 cm)
Peso: 3,46 libras (1,573 kg)
En la mitología griega, Medusa (/mɪˈdjuːzə, -sə/; Μέδουσα "guardiana, protectora") era un monstruo, una Gorgona, generalmente descrita como una mujer humana alada con serpientes venenosas vivas en lugar de cabello. Aquellos que contemplaran su rostro se convertirían en piedra. La mayoría de las fuentes la describen como hija de Forcis y Ceto, aunque el autor Higino la considera hija de Gorgona y Ceto. Según Hesíodo y Esquilo, vivió y murió en una isla llamada Sarpedón, en algún lugar cerca de Cistene. El novelista del siglo II a. C. Dionysios Skytobrachion la sitúa en algún lugar de Libia, donde Heródoto había dicho que los bereberes originaron su mito, como parte de su religión.
Medusa fue decapitada por el héroe Perseo, quien a partir de entonces usó su cabeza, que conservaba su capacidad de convertir en piedra a los espectadores, como arma hasta que se la dio a la diosa Atenea para que la colocara en su escudo. En la antigüedad clásica, la imagen de la cabeza de Medusa aparecía en el dispositivo para evitar el mal conocido como Gorgoneion.