En la primavera de 1947, en el suroeste de Francia, Pierrot, de unos doce años, pesca felizmente pequeños gobios en un canal. Orgulloso de su pesca, regresa a casa y se encuentra con sus padres, que dedican gran parte de su tiempo y todas sus energías a su café, "Le Café du pont", al que acuden trabajadores y barqueros. Pierrot y su hermano pequeño crecieron en el contexto del café, con sus clientes habituales, en una familia modesta, unida y feliz que experimentó las restricciones de la guerra y la ocupación alemana. A pesar de los giros a pagar y de todo el trabajo que el café exige a sus padres, su padre sueña con construir un gran salón de baile. Pero un día, en la consulta del médico, el padre de Pierrot se enterará de que su mujer, que se ha agotado demasiado en el trabajo, debe desc